miércoles, 19 de noviembre de 2008



"Nosotros sentimos que incluso si todas las posibles cuestiones científicas pudieran responderse, el problema de nuestra vida no habría sido más penetrado. Desde luego no queda ya ninguna pregunta, y precisamente esta es la respuesta"

L. Wittgenstein.

"...pero de lo que se trata es de transformarlo"

K. Marx.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Hoy hemos celebrado el día mundial de la Filosofía, y tal y como habíamos propuesto, la gente se ha escrito la palabra “filosofía” en el brazo, la frente, o incluso el cuello… o pegado alguna pegatina, que para los mas vergonzosos tampoco está mal. Han participado casi todos los alumnos de bachillerato y bastantes de 4º de ESO, es decir, la mayoría de los que de algún modo han tenido contacto, en mayor o menor medida, con la filosofía o algunas de sus disciplinas.

La lectura del día es evidentemente buena. En la mayoría de los casos, más allá de lo llamativo y novedoso, había un compromiso claro con la búsqueda, con la pregunta, con esta gymkana (o gymkahana como puse en la pizarra) inagotable que supone o debería suponer el saber filosófico.

No es la tarea de los profesores de filosofía garantizar que la filosofía siga viva, sino más bien dejar que los alumnos descubran que la FILOSOFÍA seguirá viva mientras que ellos no dejen de preguntar, mientras no dejen de preguntarse.

Hector dijo...

Gracias.
En mi centro el seguimiento ha sido desigual. Compañeros profesores se han pegado carteles con la plabra "filosofia", de los alumnos algunos lo llevaban en un brazalete confeccionado para la ocasión, otros escrito en la mano, otros en la frente.
Ha sido una muestra de solidaridad, cariño, y complicidad muy entrañable.
He explicado en los cursos en los que no doy asignaturas relacionadas con la filosofía (y donde no propuse la actividad por razones obvias) a petición del alumando esa "marca" en la frente. Les he explicado la caverna de Platón y la estrecha relación que existe entre filosofía y educación.

La filosofía perdurará, porque tal como digo en el blog, los niños siempre preguntarán el por qué de las cosas, y los adultos no tendremos nunca todas las respuestas, y para seguir conversando, tendremos que aprender a filosofar.

Otra cosa son los poderes públicos que nos escatiman preciosos espacios horarios que podrían ser utilisimos para introducir, por ejemplo, "Filosofia para niños".

Gracias Juanjo. Un fuerte abrazo.

Juanjo Martín dijo...

Este año volveremos a proponer la lucha del saber, de su búsqueda y deseo... de nuevo con la intención de que ese deseo se vea satisfecho con un número de horas adecuado y necesario... para ellos, que son los que más lo necesitan.
Un fuerte abrazo.